Es temprano. Hombres de muchas regiones del mundo caminan hacia la Plaza de San Pedro. Todos con una misma tarea. Llegar al aula de la Congregaci\u00f3n General 36. Llevan una cinta verde, su nombre y su foto. Lo hacen por calles diversas, aquellas de sabrosos rincones romanos. La ma\u00f1ana es fresca y soleada. Entramos un momento a la Iglesia de Sant Ignazio. El esplendor de la arquitectura italiana y el aroma de la tradici\u00f3n jesuita hacen m\u00e1s amable el empezar el d\u00eda. Continuamos el camino y pasamos el Panteon, la Plaza Navona, la gelateria… avistamos el castillo de Sant Angelo. Estamos cerca. Mientras avanzamos hacia Borgo Santo Spirito 4 coincidimos con m\u00e1s peregrinos. \u00a1Es la Compa\u00f1\u00eda de Jes\u00fas que est\u00e1 en marcha!<\/p>\n
La elecci\u00f3n de un nuevo Superior General para la Orden nos ha tra\u00eddo a Roma. En el 2008, Peter Hans Kolvenbach hab\u00eda renunciado tambi\u00e9n. Desde enero de ese a\u00f1o, Adolfo Nicol\u00e1s anim\u00f3, inspir\u00f3 y pastore\u00f3 la familia ignaciana en el mundo. Con fuerza nos record\u00f3 la universalidad y disponibilidad de nuestra vocaci\u00f3n. Nos habl\u00f3 de ser cuerpo, y serlo con otros y otras de vida laical, religiosa y sacerdotal. Enfatiz\u00f3 que hab\u00eda que hacerlo en compa\u00f1\u00eda. Tom\u00f3 en serio la bandera de reconfiguraci\u00f3n provincial como algo caracter\u00edstico de su gobierno, campo dif\u00edcil y necesario de abordar. Nos llam\u00f3 la atenci\u00f3n sobre las distracciones. Nos interpelaba para ponerles nombre y trabaj\u00e1ramos sobre ellas, pues pod\u00edan diluir la calidad de nuestra entrega, de nuestro trabajo, de nuestra misi\u00f3n. Y por sobre todo nos habl\u00f3 de hacernos silencio, de forjar una profundidad espiritual que fuera capaz de pensar el mundo en toda su cruel y esperanzadora realidad.<\/p>\n
Ese hombre estaba en el Aula de la congregaci\u00f3n para decirnos desde su serena sabidur\u00eda que la fragilidad de la vida le llamaba a renunciar. Reconoc\u00eda con la cercan\u00eda y sencillez de siempre que se necesitan renovadas energ\u00edas para conducir la barca de Ignacio. Esa es la Compa\u00f1\u00eda. Eso es un jesuita, un hombre que procura ser siempre fiel al carisma de discernimiento que le exigen las circunstancias existentes, que no se aferra, que no se detiene ni lo sugiere a otros. Alguien que permite que el fluir de la historia contin\u00fae. Somos finalmente, servidores cuyo horizonte es buscar permanentemente la mayor gloria de Dios.<\/p>\n
Los hombres de cinta verde se encuentran en diversas reuniones. Hay que proseguir. Surgen temas a conversar, discutir, plantear y recabar. Escuchar se torna prioritario. Es imprescindible comprender la situaci\u00f3n actual del mundo, de la Iglesia, de la Compa\u00f1\u00eda misma para pensar en el hombre que suceder\u00e1 a Adolfo Nicol\u00e1s. La riqueza del di\u00e1logo de los peque\u00f1os grupos, de pasillos y de los recesos hacen de la curia generalicia un escenario de deliberaciones como las de los primeros compa\u00f1eros. La Congregaci\u00f3n General 36 es un abanico de oportunidades.<\/p>\n
La CG 34 en su decreto 26 nos hablaba de una santa audacia, una cierta agresividad apost\u00f3lica muy t\u00edpica de nuestro modo de proceder. En su homil\u00eda del domingo, el padre Cador\u00e9 destac\u00f3 en Ignacio el ser capaz de apostar por la audacia de lo improbable. \u00bfCu\u00e1les las fronteras apost\u00f3licas, las encrucijadas de nuestros tiempos, a los que este grupo de hombres deben poner especial atenci\u00f3n para responder con fidelidad a la Compa\u00f1\u00eda en el mundo entero? Es el momento de reflexionar y orar. Es el tiempo de la CG 36. Ella es en s\u00ed misma, una audaz oportunidad.<\/p>\n
Gustavo Calder\u00f3n Schmidt, S.J.
\nElector \u2013 Ecuador<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
Es temprano. Hombres de muchas regiones del mundo caminan hacia la Plaza de San Pedro. Todos con una misma tarea. Llegar al aula de la Congregaci\u00f3n General 36. Llevan una cinta verde, su nombre y su foto. Lo hacen por calles diversas, aquellas de sabrosos rincones romanos. La ma\u00f1ana es fresca y soleada. Entramos un […]<\/p>\n","protected":false},"author":35,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_genesis_hide_title":false,"_genesis_hide_breadcrumbs":false,"_genesis_hide_singular_image":false,"_genesis_hide_footer_widgets":false,"_genesis_custom_body_class":"","_genesis_custom_post_class":"","_genesis_layout":""},"categories":[17,137],"tags":[90,145],"yoast_head":"\n